12. Dios y la educación de los hijos
En Edufamilia sabemos que cualquier persona que intervenga en la educación de los hijos colabora con Dios en el crecimiento del chico, que es el único y auténtico protagonista de esa mejora.
En Edufamilia sabemos que cualquier persona que intervenga en la educación de los hijos colabora con Dios en el crecimiento del chico, que es el único y auténtico protagonista de esa mejora.
Educar no es solo respetar, sino fomentar la libertad de los hijos positivamente, de acuerdo con su edad y circunstancias. Es una idea clave en Edufamilia.
Un amor equivocado lleva a malcriar a los hijos. Hay que aprender a amarlos, a buscar el bien real del hijo: ni solo el aparente ni nuestro bien (Edufamilia).